Entre entrañas tintineante de claustrofóbica mies te extraño conmensuradamente y no puede ser...
Ella lo sabe, tú lo sabes y yo he quedado atrapada en el tiempo... Ya no puedo retroceder, pues mis labios ya han hablado demasiado, ya no puedo adelantar, porque el peligro a vientos se ve...
pues quién fuera pedazo de hielo para no conevrtir el encanto de una tarde en un recobeco con sabor a miel tostada y caramelo de pétalos de márfil...
En qué se convierte la nostalgia y las miradas cuando ya no deben hablar, necesito socorrer el silencio, y a la vez requiero desaparecer...
Tengo miedo otra vez, quisiera que estuvieras aquí, y es tan extraño porque no debiese ser yo la que pidiese esto... Es tan extraño porque no debiera ser yo la que sintiese esto, pero casi no lo puedo evitar... ¡Qué dilema el mío!, si no fuera un día menguante y yo una equivalencia de encuentros, sería capaz de convertirme en el segundo más esperado, pero no puedo, no debo y lo lamento... no por ti, pues no lo sabes, pero realmente atormenta esta ambigüedad del sentir... atormenta despertar sabiendo que los sueños no son la realidad y que mi voz no te alcanza a contemplar.
Susurra una palabra dentro de lo normal, susurra un acierto entre tres y ya sabes el lugar de mi vuelo...
No sé cómo decirlo, pero no importa no pretendo hacerlo...
No sé cómo dejar de sentir, pero no importa no pretendo dejar de hacerlo...
Hoy te esperaba, pero el tiempo se detuvo a tropezaderos hasta que dejaste de llegar...
Hoy me embarque en perpetuo silencio... No sé si detenerme o seguir atrapada en el tiempo, auque técnicamente en ambos casos no tendría que hacer nada... simplemente desvanecer hasta que las decisiones de otros persuadan tu corazón antes que el mío...
Cynthia Canto Canto.
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