
Quizás por ello he encontrado... la apertura a un nuevo mundo... uno real y eterno, donde las palabras se mezclan en respuestas precisas, en mensajes perfectos.
Tengo el deber de hacer lo correcto, pues he sentido la influencia de un amigo constante, he he nutrido mi alma y comprendido mi naturaleza... Por ello ha sido, es y será el momento de enseñar está verdad. Despojarme del torrente invasivo y de la penumbrosa inquietud. Quiero sentir el privilegio de enriquecer a quienes estén dispuestos a creer que son hijas e hijos espirituales de un Padre Celestial amoroso, con el propósito de que comprendan su naturaleza y valor...
La seguridad de alcanzar cada una de mis metas, me permite confiar en que no decaeré jamás, no obstante... la adversidad no se tarda en llegar, por lo que he tenido que reforzar mi soporte espiritual una vez más... Si bien tengo el deseo, la motivación en ocasiones se dispersa por mi inconstancia, y una vez más debo comenzar a afianzar mi propia construcción, crear las formas de mantener viva mi visión.
Sé que el esplendor a alcanzar va más allá de mi comprensión y sé también que puedo lograr tal transformación. En una apertura de mi alimento, la meditación es un recurso preciso, donde el escenario mental debe luchar por mantener su alineación dejando que el sentimiento se allegue con valía.
Por Cinthia Canto Canto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario