
Tu distancia es como mi itinerante respuesta... y tu mirada es el vaivén de mi presencia.
Quiero tu talento, como si fuese la única causa no predecible que permite mi motivación. Debo aclarar que me intriga tu voluntad, pero estoy segura que no corro riesgos...
Luego de descubrir tu mirada pausada y ligera, he sitiado toda frontera, para que nuestro elemental mundo paralelo se intersecte, en un encuentro trascendental... como mágico encanto de inusual suavidad.
He pensado mitigar en nuestros corazones la pausa enclaustrada que a veces envuelve en la soledad... anidando el cobijo de tu minuciosa sinceridad, entre la templanza y el frenesí del nerviosismo que nos consume.
Las palabras entorpecen nuestro acercamiento, pero tu sonrisa anima mi alma, aun cuando sea sólo mera cortesía...
A campo abierto desdibujo el arte libre de imaginar, entre un vuelo y un dominio a tu esencia que encanta tan sólo con estar, como si fueses el arte creado para plasmar entre una mezcla de sabores que no cualquiera puede discernir.
Un artista que dibuja sobre la lectura de su vida... expresando lo que debe alcanzar... como un niño libre de estructuras sintácticas, por favor no sostengan sus nociones de tiempo...
Un artista en campo abierto, en eso nos transforman nuestros sueños, como de letras vertidas en melodías sin medida, como imagen perpetua de infinita majestuosidad... en donde los instantes se vuelven palpables.
Por Cinthia Canto Canto.
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